El mejor jardinero derecho mexicano de todos los tiempos es Matías Carrillo
- Matías “Coyote” Carrillo
- Karim García
- Epitacio “La Mala” Torres
- Miguel Suarez
- Luis Alfonso García
Uno de los jugadores más completos en el beisbol moderno ha sido el sinaloense Matías Carrillo García, quien tuvo una brillante carrera de 27 años en el beisbol profesional, 19 de los cuales defendió la causa del club Tigres en la Liga Mexicana de Beisbol, convirtiéndose en su pelotero más emblemático.
Carrillo portó el número 24 en el dorso y tuvo la oportunidad de jugar en sucursales de Estados Unidos, así como estadías con los Cerveceros de Milwaukee y Marlines de Florida en Ligas Mayores; pero su longeva y exitosa carrera la realizó en la Liga Mexicana de Beisbol.
El famoso “Coyote” es un orgullo viviente egresado de la primera generación de la Academia de Pastejé “Ernesto Peralta Quintero” en 1982. Ese mismo año debutó en la Liga Mexicana del Pacífico y fue nombrado Novato del Año. En 1984 llegó a la organización de los Tigres.
La leyenda felina presume el liderato de prácticamente todos los departamentos ofensivos en la historia de la franquicia, entre ellos el de temporadas jugadas (19), juegos (1,919), veces al bat (6,859), carreras anotadas (1,421), hits (2,325), dobles (398), cuadrangulares (324), extrabases (776), carreras producidas (1,486), bases robadas (234), porcentaje de bateo (.339) y bases por bolas (939).
Matías inauguró y es el único miembro del club 250-250, al conectar más de 250 jonrones y estafar más de 250 bases en Liga Mexicana, demostrando porque es considerado, junto con Miguel “Becerril” Fernández, el mexicano que mejor representa Las Cinco Herramientas – batear para promedio, poder, velocidad en las bases, buen guante y buen brazo en los jardines.
Conquistó cinco campeonatos del circuito veraniego: 1992, 1997, 2000, 2001 y 2005; participó en diferentes selecciones nacionales, fue nombrado “Capitán Honorario” de México en el Primer Clásico Mundial de Béisbol y llegó a hilar 15 temporadas promediando arriba de .300 de bateo.
En invierno jugó para Guaymas, Mexicali, Los Mochis, Mazatlán, Guasave y Obregón, consiguiendo el trofeo de Jugador Más Valioso de la LMP en 1992 como campeón de bateo, carreras anotadas y bases robadas.
También en el Pacífico es tercer lugar histórico en cuadrangulares, con 159, solo detrás de Héctor Espino y Eduardo Jimenez.