Dueño de una personalidad única, el sonorense Humberto Saiz es sin lugar a dudas el mejor umpire que ha tenido el beisbol mexicano en las últimas décadas.
Ahora, alejado del beisbol profesional, el famoso “Lobito” Saiz trabaja con un buen amigo suyo y en ocasiones participa en charlas para niños y jóvenes peloteros.
Por primera ocasión, Saiz habla del evento por todos conocido suscitado el pasado 19 de diciembre de 2021 en el Estadio Teodoro Mariscal de Mazatlán, el cual derivó en una suspensión indefinida por parte de la Liga Mexicana del Pacífico (LMP) y provocó que la Liga Mexicana de Beisbol (LMB) no lo volviera a contratar.
“Nací en una tierra en donde no se vale mentir”, dice Saiz para abrir la conversación. ”Me volví a equivocar y el precio que ellos quieran ponerle a mi error, que se lo pongan. El que se equivocó fui yo y no tengo nada que decir”, admite.
La carrera de Humberto Saiz inició profesionalmente en 1982 cuando apenas tenía 18 años de edad. Desde entonces, su calidad como umpire ha sido reconocida por todos, incluso Alfonso Márquez, el único umpire mexicano en Grandes Ligas, ha dicho que “Lobito” tenía todas las facultades para poder llegar al mejor beisbol del mundo.
Pero Saiz ha tenido varios tropiezos en su carrera que lo han llevado a ser suspendido por lo menos en cuatro ocasiones del beisbol profesional.
“Yo he sido el niño malcriado del umpireo”, revela.
Saiz tiene un gran currículum en ambas ligas profesionales de México. Sancionó 33 temporadas en la LMB, con 27 Series Finales y 17 Juegos de Estrellas, mientras que en la LMP trabajó 27 campañas, con 25 finales y 20 Series del Caribe, y además es miembro de la dinastía más afamada de umpires de la pelota nacional.
Su padre, Víctor Saiz, está entronizado en el Salón de la Fama del beisbol mexicano de Monterrey, Nuevo León, y junto con sus dos hermanos (Víctor y Alfonso) hicieron una carrera como umpires profesionales.
“El Lobito” Saiz es el único umpire en el beisbol profesional mexicano que ha trabajado en cinco diferentes décadas.
“No sé si me van a volver a buscar para trabajar, pero tampoco estoy listo para volver. No sé como voy a reaccionar ante los aficionados y ante los jugadores. El amor al juego lo sigo teniendo, ése nunca se me va a acabar”, confiesa.
¿Cómo ha sido todo este proceso desde la suspensión?
“Lo mío no son problemas en el terreno, mi problema es repetir los mismos patrones de antes y me volví a equivocar. Me está ayudando un psicólogo y me siento bien, me siento limpio, pero lo mío es día a día.
“Fui al psicólogo por mi familia, para ayudarme. Después de Dios no hay otra cosa más bella que mi familia”.
¿Cómo tomó todo esto su familia?
“Le pedí perdón a mi esposa y a mis hijos, y todos los días le pido perdón a Humberto, porque el que tiene que dar la cara es Humberto, el ‘Lobito” no, el ‘Lobito’ era bueno nada más las tres horas que duraban los juegos”.
Con casi 60 años de edad por cumplir, Saiz ha sido apoyado tanto por la Liga Mexicana de Beisbol (LMB) como por la Liga Mexicana del Pacífico (LMP), y dice estar muy agradecido con ellos por extenderle la mano a pesar de que ya no es parte del beisbol activo.
“El que se equivocó fui yo, y no voy a hablar mal de nadie. Pero gracias a Dios hay gente que me está ayudando tanto en verano como en invierno y eso se los agradezco infinitamente”, señala.
Ahora, Humberto Saiz ocupa parte de su tiempo a compartir sus conocimientos y experiencias con jóvenes beisbolistas y personas que están interesadas en el umpireo.
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