“RUIDOS DEL DUGOUT” – LA DANZA DE LOS MILLONES.

Es muy fácil decirlo “Dodgers debe llevarse a Anthony Rendón, Gerrit Cole y de una vez a Mookie Betts en cambio con Boston” o escuchar que “Yankees debería llevarse a Strasburg y a Cole, juntos”. En la teoría luce como un movimiento tranquilo de hacer pero llevarlos a cabo no es cosa fácil de ejecutar.

Para empezar los dos colosos del béisbol tienen gran competencia. Ya no resulta igual de atractivo el ir a la “gran manzana” o a Hollywood. Hay equipos con mucho dinero y sobre todo están también en ciudades cómodas para que los jugadores lleven a sus familias a vivir. 

Eso es por un lado y por el otro está la cuestión del impuesto de lujo o lo que podemos interpretar como impuesto a la nómina. Eso es algo que “ahorca” a ciertos clubes a la hora de querer formar “súper equipos” al estilo de la NBA (donde curiosamente hay tope salarial).

Y es que al firmar a las estrellas a largos contratos provocan que un alto porcentaje de la nómina se vaya a 5,6 jugadores. Es lo que está pasando con Yankees y Dodgers.

Dodgers invirtió en su gran estrella del pitcheo Clayton Kershaw, inclusive le dio en el convenio cláusulas de “escape” si él deseaba irse antes de concluir el contrato multi anual. 

Esa ha sido creo yo una de las razones por las cuales no pudieron, durante la temporada llegar a un acuerdo con Hyun Jin Ryu el zurdo coreano que tuvo campaña espectacular y cuyos intereses maneja el agente Scott Boras.

Ryu acaba de declarar en su país que busca un convenio de 3,4 años. ¿Por cuánto dinero? Debe andar en él “vecindario” de los 100 millones de dólares. ¿Tienen los Dodgers con sus poderosos duelos para pagar ese dinero? ¡Claro que sí!

Pero también tienen otras necesidades y si exceden de los 208 millones de dólares en nómina (quizás un poco más que se pondrá como límite en 2020)  les va a caer tremenda multa por el impuesto que tendrán que pagar. 

Actualmente, sin contar los casos de arbitraje donde varias de sus figuras estarán (Bellinger, Kike Hernández, Joc Pederson, Corey Seager, Julio Urías y Chris Taylor entre otros), tienen ya 113 millones de dólares comprometidos para 2020. Tendrán que incluir unos 40 más por los arbitrajes pendientes y les quedarían 40-50 para invertir pasándose un poco del tope de nómina antes del impuesto de lujo. 

He leído que Dodgers buscará a Anthony Rendón y podrían llevárselo siendo Josh Donaldson una muy buena opción B. Con ello moverían a Justin Turner a segunda base pero sin dejar de lado un aspecto fundamental para un buen club: defensa.

Los Yankees son un caso similar al de Dodgers. Tienen varios convenios a largo plaza y ello limita sus opciones. 

Gerrit Cole es un objetivo del equipo del Bronx. El diestro creció como aficionado a los Yankees y estaría encantado de lanzar para esa exigente fanaticada pero necesita que algo pase: que le paguen su valor en la agencia libre.

Tim Dierkes de MLBTR.com lo tiene proyectado a Cole para un contrato de 8 años y 256 millones de dólares regresando a su casa en Anaheim, el tipo es del sur de California y el equipo de Arturo Moreno quiere armar alrededor de Trout y Pujols un equipo competitivo.

Esto ya representa una real y gran competencia para Yankees que necesitan ese as de rotación que los acompañe. 

Pero hay otras necesidades como cubrir la baja de Didi Gregorious que se fue a la agencia libre. Es probable que la solución esté en casa con el traslado de Gleyber Torres a esa posición para 2020.

Yankees, Cachorros de Chicago y Medias Rojas de Boston fueron en 2019 los 3 clubes que pasaron del límite que pone ligas mayores para las nóminas en aras de tener balance competitivo, que pocas veces hay, pues varios clubes prefieren “vegetar” por años para agarrar altas selecciones en draft de Junio, acumular talento año tras año pues.

Y luego para Dodgers y los “bombarderos” está el tema apetecible de adquirir a Mookie Betts que luce ahora como el jugador que Boston pudiera mover para conseguir talento de impacto inmediato pues andan “ahorcados” en su gasto de peloteros ya que varios lanzadores aumentan bastante sus salarios, Chris Sale, David Price y Nathan Eovaldi son esos 3, motivo por el cual tendrán que sacrificar a una de sus figuras y todo indica que Betts a quien no pudieron firmar a largo plazo será ese pelotero. 

Dudo que lo cambien a Nueva York y hasta pienso que no lo van a dejar en la Liga Americana. Ahí sí veo a Betts más con dirección al oeste de la Liga Nacional. 

¿Dodgers se animará a hacer un cambio por 1 año de Betts con la esperanza de firmarlo a largo plaza mientras lo tengan? ¿Padres que tiene gran sistema de desarrollo enviaría talentos a Boston por tener a otra estrella en su equipo? 

Todo esto amigos tiene que ver con el dinero. Agentes libres quieren ganar más, los que ya están en nómina van a incrementar sus salarios y el arbitraje le dará aumento en lo que devengan a otros tantos más. Ahora los equipos tienen restricciones internas de presupuesto y restricciones fiscales que vienen de MLB.

El trabajo de los gerentes deportivos o presidentes de operaciones de béisbol en grandes ligas hoy en día parece más el de un administrador de empresas que el de un “cerebro” que planea solo en lo deportivo. 

Los tiempos han cambiado y en ligas mayores el dinero provocó en alto porcentaje que eso pasara. Tenemos que acostumbrarnos quienes somos aficionados a este juego a escuchar la danza de los millones cada año.